Entrevista al fotógrafo Nacho Calonge, ‘En Internet debes proteger muy bien tus imágenes’

NACHO CALONGE, es un fotógrafo cuya producción se centra en la fotografía documental y de viajes. Sus fotografías han sido publicadas a través de diversas agencias y revistas internacionales como son Agencia Efe, Agencia Associated Press en Bolivia, Revista Viajes de National Geographic o Geo, entre otras. Ha realizado exposiciones en Milán, Guanajuato, Castilla La Mancha y Madrid. Un enamorado de la fotografía de viajes que nos cuenta en la entrevista como fotografiar sin molestar, como fotografiar sin ser visto. Además nos da su opinión sobre el robo de fotografía en internet y porqué en la actualidad es cada vez más importante compartir a través de las redes sociales y vender tus fotografías en Internet. No te pierdas su entrevista.

 

Arcadina: ¿Quien es ‘Nacho Calonge’? ¿Que te llevó realmente a querer ser fotógrafo?  

 

Llegué a la fotografía de rebote. Quería ser diseñador de interiores pero el profesor que tenía de dibujo técnico, en un arranque de franqueza, me dijo que mejor si me dedicaba a otra cosa, que para la cuestión del dibujo era bastante malo. Me dejó un poco descolocado pero ahora, tiempo después, le agradezco la sinceridad. Como estaba estudiando en una escuela de arte y también tenía artes visuales como asignatura, fue el profesor de fotografía el que me animó a seguir por este camino. Cambié de escuela, fui a otra donde lafotografía era la especialidad principal y terminé mis estudios allí. Después recibí una beca para seguir estudiando fotografía durante un año en Milán. Y así, poco a poco, fui llegando hasta aquí.

 

¿Que tipo de fotografía realizas? ¿Dónde te sientes más cómodo o qué te atrae más?

 

He hecho un poco de todo, pero mayormente me dedico a la fotografía de viajes. Empecé montando un pequeño estudio de publicidad junto a un amigo y allí tocaba hacer de todo, industrial, arquitectura, foto social… lo que saliese.

Fotografía documental. Cuéntanos qué te motivó a decidirte por esa especialidad.

 

Para mí la fotografía ha terminado siendo una pasión, y no entiendo ningún tipo de pasión sin una entrega casi total. Cuando hacía fotografía publicitaria me aburría muchísimo, era algo que hacía para pagar facturas y para comer, y por aquel entonces debo reconocer que, para ser principiantes, nos iba relativamente bien. Pero no me llenaba en absoluto, no me aportaba nada como persona. Necesitaba aprender otras cosas, de otra gente, ir recolectando experiencias que, bien junto a la fotografía o bien fuera de ella, me fuesen haciendo crecer un poco más como ser humano. Creo que con la fotografía documental se está un poquito más cerca de ese tipo de intereses. En la escuela de arte ya nos juntábamos un pequeño grupo de estudiantes que teníamos sensibilidades similares respecto a la fotografía. Creo que ahí empezó a germinar esta pasión.

 

Fotógrafo y viajero ¿Qué empezaron antes los viajes o tu amor por la fotografía? 

 

Pues llegó antes la fotografía. Mi bautismo de fuego como viajero fue con un viaje que hice a México durante la revolución zapatista. Como fotógrafo estaba todavía muy verde, ya que hacía poco tiempo que había terminado mis estudios y no tenía mucha experiencia, pero me interesaba muchísimo vivir de cerca todo lo que estaba suponiendo entonces aquel alzamiento para defender los derechos de los más pobres en Chiapas. Estuve varios meses en este país. Después he seguido viajando casi de continuo a Latinoamérica. Desde hace poco estoy empezando a viajar más por Asia. En total habré viajado por aproximadamente 26 o 27 países. En algunos con más intensidad y tiempo que en otros, pero bueno… siempre con las mismas ganas.

 

Normalmente tus modelos son desconocidos ¿Qué tipo de personas dan más juego fotográfico?  

 

En general personas que viven dentro de un anonimato casi rutinario. En muchos casos tienen historias que contar muy interesantes, o viven en mundos que, al ser tan pequeños e igualmente anónimos ante los demás, han sabido conservar una integridad cultural fantástica. Te pueden sorprender mucho más que un personaje público.

¿Cuándo crees que es mejor bajar la cámara o que sacrificarías por obtener una buena fotografía?

 

Hay veces que disparamos siguiendo una rutina que puede ser muy destructiva. Siempre hay que fotografiar, siempre hay que obtener un registro… No siempre. Evidentemente haciendo fotografía documental hay veces que no puedes ir pidiendo permiso primero a las personas antes de fotografiarlas. Normalmente, si es posible, me gusta acercarme y contactar primero antes de sacar la cámara. Si una persona dice no, no hago la foto nunca. Cuando no hay problemas y se puede ser “invisible” es como si los astros se alineasen, llega el momento de disfrutar trabajando. También hay veces que es mejor disfrutar el momento con amigos o con tu pareja en vez de estar haciendo fotos. El ser humano no se compone solamente de fotografía. ¿Sacrificar por una buena fotografía? sinceramente no lo sé… Por ejemplo, no creo que arriesgar la vida por intentar hacer una foto sea lógico, pero eso es una opinión muy personal, seguramente que una persona que hace fotos en conflictos te dijera lo contrario, y tendría tantas razones como yo.

Lo mejor es que fruto de estos viajes, tu fotografía ha sido publicada a través de diversas agencias y revistas reconocidas a nivel internacional, como son Agencia Efe o National Geographic. ¿Has notado algún cambio, te ha servido para relanzar tu carrera?

 

¿Cambios? pues la verdad es que a nivel “negocios” no mucho. Mañana pueden sacar alguna foto tuya en una revista famosa y después pasar mucho tiempo sin publicar simplemente porque a los medios no les interesen determinados temas, sin importar la calidad con la que se hallan podido tratar. Ese tipo de reconocimiento es en muchos casos bastante efímero. Al menos, eso sí, sirve para indicarte como fotógrafo qué cosas vas haciendo bien y en qué otras te puedes estar equivocando. Hay veces que estamos demasiado obsesionados en algunos trabajos y voces críticas de editores u otras personas con experiencia vienen bien. El final siempre es mejorar, como fotógrafo y como persona. Si te publican, bienvenido sea, que de paso hay que comer.

Recientemente has realizado varias exposiciones sobre tu trabajo como ‘Los viajes de Nacho Calonge’, ¿Qué es lo que obtienes de estas experiencias? 

 

Bueno, estas charlas sobre fotografía de viajes han ido principalmente dirigidas a personas que están empezando a introducirse en el mundo de la fotografía, o bien a algunas otras que sienten pasión por los viajes. Mis trabajos pueden ser mejores o peores pero, tras tantos viajes, creo que alguna cosa interesante tendré para aportar a este público. Muchas de las preguntas que me hacen son preguntas que yo me hacía también cuando empezaba. Siempre es bueno tener información para evitar tener que ir dando palos de ciego. Si hubiera asistido en mis comienzos a más charlas con fotógrafos, más de un coscorrón me hubiera evitado.

Ahora, hablemos de tu web ¿Porqué decidiste venir a Arcadina? 

 

Conocí las ofertas de Arcadina a través de Internet. Necesitaba una página nueva y me puse a buscar información. Realmente me convenció enseguida la facilidad con la que se podía configurar la página web y el excelente resultado final. Soy bastante torpe para cuestiones relacionadas con la programación o con determinados lenguajes de Internet, así que necesitaba algo muy sencillo, casi para un dummy. Si encima luce tan profesional, pues mucho mejor.

 www.nachocalonge.com

¿Qué tipo de web tenías antes de conocernos? 

 

Antes diseñaba yo mismo la página con un programa de Apple. Era bastante fácil pero los resultados eran bastante pobres. Podía tener una página pero, con el tiempo, me fui dando cuenta que era algo para salir del paso. No había opciones para redes sociales, no tenía un aspecto profesional, en fin… muchas carencias que no podía suplir. Ahora, con la web de Arcadina, se puede decir que tengo todo lo que necesito. Me es sencillo crear o modificar galerías, llevar un blog, etc. Realmente me ahorra tiempo. Ya la he recomendado a algunos amigos fotógrafos que tienen más o menos las mismas necesidades que tengo yo.

¿Vendes tu fotografía en Internet? ¿Cuáles son las oportunidades de negocio de la venta en Internet?

 

Esta es una de las características de la página que por ahora no utilizo. El tipo de fotografía que hago es más para publicaciones que para clientes más “particulares”. Tengo un amplio archivo pero lo voy vendiendo siempre a través de agencias o bancos de imágenes, lo he hecho pocas veces a personas interesadas en determinadas fotos. Pero siempre es bueno tener la posibilidad de venta a través de la web. Si encontrase clientes que me contactasen para comprar fotos de las que aparecen en la web, evidentemente sería fantástico.

Dónde sientes que estamos actualmente con los nuevos medios de comunicación, redes sociales, publicidad comprada en google, vender fotografía en la web, etc. 

 

Las redes sociales son un buen método de promoción, se puede llegar a muchísimo más público que antes y pueden ser un buen puente para las ventas. ¿Vender a través de la web?, como comentaba en la anterior respuesta, en mi caso no lo veo claro. Es más, Internet en muchos casos, más que para vender fotos, sirve para que te las acaben robando para webs de medios de comunicación, empresas, etc. Esto es un problema muy grave que habrá que atajar de alguna forma. En Internet debes proteger muy bien tus imágenes. Por eso me parece bien que ahora Arcadina haya añadido lo de la marca de agua. Y aunque en muchas ocasiones la recortan o la retocan, ya es un impedimento más a la hora de utilizar una foto sin permiso del autor.

Para finalizar ¿Tienes algún proyecto próximo en mente?  

 

Pues un par de viajes están rondando ya mi cabeza, dos proyectos muy diferentes entre sí. Esta vez toca volver a Latinoamérica,  después de un par de años viajando a Asia. Aún está toda la planificación un poco verde para ir asegurando nada, estoy buscando contactos, localizaciones e información, pero creo que al final sí saldrán adelante. Para la página web ya tengo algún trabajo nuevo preparado, pero es un trabajo que ya se ha vendido a una revista y, por respeto al cliente, no quiero colgarlo en la página hasta que no haya sido publicado, ya que ocupará la portada y el espacio central de dicha publicación.

Y ¿cuál es tu sueño?

 

Poder vivir de la fotografía de una forma más digna, quiero decir, en un mundo en el que la fotografía documental tenga un valor, donde los medios de comunicación no piensen que la fotografía es algo adicional de lo que se puede prescindir o que se puede utilizar sin permiso del autor. Que se valore la calidad de los trabajos en su justa medida y la compensación económica sea acorde. Cada vez las tarifas para fotos son más ridículas y nos tratan como si fuéramos tontos. En cierto modo, alimentado por muchos que han decidido trabajar gratis con tal de publicar. Resumiendo, me gustaría seguir teniendo la posibilidad de hacer fotos y vivir de ello. No pido demasiado, ¿verdad?